Todos los seres sintientes, ya sean grandes o pequeños, comparten las mismas emociones

Y ahora tenemos un mensaje del corazón de Tuệ Lâm in Âu Lạc, también conocido como Vietnam:

Querida y Amadísima Maestra, me gustaría compartir mi visión interior, esperando que este mensaje pueda llegar e inspirar a personas alrededor del mundo. Creo que es muy importante para quienes aún piensan que simplemente dejar de consumir personas animales grandes es suficientemente bueno.

Durante la meditación con el Método Quan Yin, tuve una visión interior sobre una pequeña y hermosa cangreja (sentí que era equivalente a un niño menor de cuatro años).

La pequeña cangreja estaba jugando sola bajo el mar con una alga pequeña y los arrecifes de coral. De repente, un grupo de personas apareció y empezaron a perseguirla.

La pequeña cangreja estaba aterrorizada, desesperada lloraba y tratando de correr donde sus padres por ayuda. Luego de escapar por un rato, ella volvió a ver hacia atrás y vio que no había nadie detrás. Ella respiró aliviada y se sintió feliz. Pero ese breve momento de felicidad rápidamente se desvaneció. La pequeña cangrejo miró hacia arriba y vio a otro grupo de personas acercándose. En medio de sus gritos desesperados, esta vez, ella no pudo escapar de su agarre. Yo traté de suplicarles, diciéndoles, “Por favor no coman esta pequeña cangrejo. Por favor devuélvanla al mar”. Pero parecía que nadie podía escuchar mi súplica. Después de capturar a la pequeña cangrejo, la gente le arrancó el caparazón, le echaron salsa y se la comieron con gusto. Lo que sucedió luego fue sorprendente: La persona que comió a la pequeña cangrejo empezó a echar espuma por la boca, sufriendo un severo envenenamiento y tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital.

Cuando desperté de la meditación, aún estaba sollozando, ya que sentía plenamente las emociones de la pequeña cangrejo – desde felicidad y alegría al miedo y pena por nunca ver más a sus padres. Lo que más me rompió el corazón fue sentir el alma de la pequeña cangrejo – una hermosa, inocente y pura alma de un niño. Que el Cielo bendiga a la pequeña cangrejo con una vida nueva, mejor y más feliz. Y deseo sinceramente compartir la historia de la pequeña cangrejo con todos, para que puedan comprender que todos los seres pequeños, como las criaturas del mar, también tienen familias, padres y hermanos. Ellos tienen sentimientos, al igual que nosotros.

Por lo tanto, antes de querer hacerle daño a cualquier criatura, pregúntense ustedes primero: “¿Te gustaría presenciar a alguien comiendo a tu pequeño hijo que juega alegremente frente a tu casa?” La respuesta seguramente será “NO” – y ese es el mensaje que la pequeña cangrejo quiere enviarte. Y protege tu propia vida, porque consumir personas animales daña tu propio cuerpo, ya que las personas animales no están destinadas a ser alimento; ¡ellos son seres sintientes! Discípula Tuệ Lâm de Âu Lạc (Vietnam)

Pensativa Tuệ Lâm, Esperamos que este recordatorio benévolo convenza a muchos a cambiar sus elecciones alimentarias a una dieta vegana.

La Maestra comparte Sus profundos pensamientos contigo: “Empática Tuệ Lâm, gracias por tu compasión y meditar con un corazón puro así otros seres pueden encontrar una manera de conectar contigo Interiormente para permitirte sentir de primera mano su sufrimiento. Todos los seres sintientes, ya sean grandes o pequeños, comparten las mismas emociones que nosotros. Cada creación de Dios tiene su propósito y es un pecado quitar una vida. Nuestro sueño de un planeta pacífico solo puede ser alcanzado cuando el llanto, lágrimas y los gritos de las personas animales terminen debido a nuestros actos de crueldad. Que tú y el entusiasta pueblo aulacense (vietnamita) sea bendecido con sabiduría para llevar un estilo de vida dhármico, en la Guía de Buda. Abrazándote en el consuelo de Dios y mucho amor”.